Teoría de cuerdas

Teoría de cuerdas,  manifestación en el ser humano.

La sanación

         Teoría de cuerdas. 
Hace más de un año, a raíz de
la observación palpable de los cambios en mi físico que se han observado desde 2012, tuve la intuición que se
manifestaba en mi la denominada Teoría de cuerdas, pero repito, era
sólo una intuición, como algunas que he tenido a lo largo de mi vida.
Teoría-de-cuerdas     Sin desechar esa idea, me resistía a
creerla. Innumerables científicos llevan muchos años estudiando esa teoría, sin
conseguir unanimidad en cuanto a su lógica, pues parece ser existen
contradicciones en la teoría. Intenté entender cómo se manifiesta, puesto que
nadie conoce de su existencia práctica.
     Leyendo sobre ello en Internet, pude
aclarar algo mis conceptos, y en el correr de unos meses, paralelamente, he ido
observando cambios que me permiten asegurar que dicha teoría no solamente
existe, si no que puede manifestarse en el ser humano.
        
    Y en esta tesitura me encuentro.
Intentaré explicarme, como vengo manifestando reiteradamente, que la vida es
mucho más sencilla de lo que imaginamos, que el Universo tiene respuestas para
(casi) todo, y nosotros nos resistimos a creerlo. Todo lo que no puede
demostrarse, no existe, para el mundo científico. Partiendo de la base de que
lo que es arriba es abajo, y como es adentro es afuera, y viceversa, cualquier cosa posible en el Universo, lo ha de ser  en nuestro cuerpo físico, que es ni más ni menos un diminuto
Universo.
      El ser humano, en su lucha constante y
cotidiana, está pendiente estrictamente de su entorno, de los demás,
obsesionado por su progreso económico, por nuevos descubrimientos que den
frutos multimillonarios, en competencia ilimitada, en una carrera en la que
todo vale. La única ética es la del poder, y amasar la mayor fortuna posible,
no importa los cadáveres que se dejen en el camino. De nuestro interior, somos unos ignorantes.
         Esta
vida hay que reventarla, sólo se vive una vez, dice la inmensa mayoría de la
gente, si bien es un error, un concepto equivocado, desde mi punto de vista y
experiencia.
         Como narro en mi libro YO
FUI.Testimonio de una regeneración
, yo pasé de eso, y hace tiempo me asomo a
mi interior, para conectarme con mi Ser Superior, o como queramos llamarlo, es
lo de menos; y como algunas otras personas, con el tiempo es posible. Esto hace
que veamos la vida de manera diferente. La mayoría de la gente busca su
felicidad por todas partes sin encontrarla, si bien algunos sabemos, que la
felicidad está muy cercana a nosotros, concretamente en nuestro interior.

Manifestación de la Teoría de cuerdas

          
Siguiendo la Teoría de cuerdas de
Brian Greene, baso mi experiencia en su minuciosa descripción. Primero se marcó
un punto cercano a la confluencia de cada uno de los lagrimales, punto que no
tiene dimensiones.
         Posteriormente apareció otro punto en
la parte alta del párpado superior, cercano a la ceja, y apareció una línea
recta, inclinada, en dirección opuesta a la nariz, ya en la primera dimensión.
En realidad, este nuevo punto se veía un verdadero anclaje en esa parte del
párpado.
         Al
poco tiempo, desde el punto superior o de fijación, apareció otra línea,
formando una quebrada hacia abajo en un ángulo de unos 40 / 45º, uniéndose con
el borde del párpado inferior, ligeramente curvado, formando una especie de
triángulo.
         Se había pasado a la segunda dimensión.
Simultáneamente, la superficie de ese pequeño triángulo comenzó a formar
pequeñas arrugas de extraña forma, dando lugar a un espacio tridimensional.
          Primero aparecieron como unas estalactitas y
estalagmitas, si bien no coincidían la de arriba con la de abajo, sino que era
una especie de soporte semi curvo de velas antiguo, en forma de
«cuerdas» informes, unas junto o confundidas con otras, que iban
disminuyendo en número conforme iban ascendiendo, como un árbol ramificado
invertido.
         Lo curioso era que cambiaba
constantemente su aspecto, en cuanto a rugosidad, incluso color. En realidad
tenía la textura de una alfombra de gruesa lana manual con los cabos o cuerdas
indistinguibles, ya que estaban unidas y mezcladas, en su textura y colores.
          Era una extraña y rugosa membrana, en
constante cambio. Tardé tiempo en darme cuenta, que aquellos constantes
cambios, eran producto ni más ni menos que de una constante vibración. Sobre
todo por las noches, cuando me acostaba, notaba que la pirámide bajo la que
dormimos, me activaba de inmediato esa zona, percibiendo notablemente las
vibraciones en los párpados.
          Pronto me dí cuenta que aquello era una
extraña experiencia. El borde inferior del párpado empezó a adquirir un volumen
que yo en mi vida he tenido, de color rojizo morado, e incluso en el ojo
izquierdo tenía una especie de pequeña supuración, ya que se me formaba una
pequeña costra. Parecía como si tuviera vida propia, una vez iniciadas las
vibraciones. Muchas mañanas aparecía con los bordes muy inflamados, y los
párpados hinchados, y durante la mañana se iban desinflamando y se notaba que
la membrana se iba formando, alisando cada vez más con el paso de los meses.
          A su vez, el párpado inferior se fue
ampliando, absorbiendo las arrugas colindantes, sobre todo del párpado
superior. Debo decir, que experimenté proyectar las vibraciones a esa zona,
mentalmente, cuando no lo hacían de inmediato las vibraciones de la pirámide, y
el resultado era el mismo. Con este método, vi que se aceleró la regeneración
de los párpados, y pronto el del ojo derecho, tomó la textura de una membrana o
piel lisa, mientras el ojo izquierdo, sigue un proceso más lento.
         En definitiva, el rejuvenecimiento que se inició a los 65 años, va lentamente sin prisas pero sin pausas, recomponiendo
alternativamente varias partes de mi cuerpo, y es quizás la regeneración de los
párpados la parte más llamativa. Me han desaparecido arrugas, que por sus
características parecen cicatrices, si bien ese proceso, es bien diferente del
de los párpados.
         Para mí no hay la menor duda que se
manifiesta la Teoría de cuerdas, por muy extraña que parezca mi experiencia. Sé
que mucha gente no va a creerlo, pero tengo muy claro que el rejuvenecer de
forma palpable a los 65 años no se oye cada día. Tendré la suficiente paciencia
para demostrar, dentro de 5 o 10 años, que mi rejuvenecimiento es una realidad,
que evidentemente la medicina no acepta.
         La tabla de sanación egipcia bajo
pirámide que con frecuencia practico, procedente del Antiguo Egipto, o
energioterapia piramidal, da respuesta a muchos males, como los que he
padecido, o los casos de hemiplegia y esclerosis múltiples que estamos
tratando, entre otros, con tan excelentes resultados. El tiempo pondrá las
cosas en su sitio. Siempre ha habido locos en la vida, que a veces siglos
después les han dado la razón.
         Sólo que en éstos tiempos, el progreso
en las telecomunicaciones va a acelerar y simplificar este caso. No se puede
negar lo evidente, por muy extraño que parezca. Vivimos tiempos de grandes
cambios. Energéticamente estamos entrando en otra dimensión. Ver para creer.
Hay
que despertar consciencia.

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