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Esclavos de nuestra mente. Hace años
leí el libro El monje que vendió su Ferrari, una fábula que narra la vida de un
exitoso empresario, quien decidió dejar los negocios y marchó a la India, donde
tuvo tal cambio espiritual, e incluso físico, que cuando regresó, su antiguo
socio no lo reconoció.

         Una interesante historia de la que me
quedó grabada una frase, que marcaría el nuevo rumbo de mi vida: todos somos Esclavos
de nuestra mente. Pronto entendí el significado. La mayoría de la gente
no observa que su mente, cambia la idea inicial que es una intuición, por
cualquier otra a su capricho, sin importarle el perjuicio que te ocasiona.

         Está en constante movimiento, que te
aturde e impide que no puedas concentrarte. Me inicié en la auto observación y
pronto pude controlarla. De ser mi enemiga, la puse al servicio de mi
consciencia. Es el resultado de dejar pasar los pensamientos, sin involucrarte
en ellos y dejar de ser Esclavos de nuestra mente. Es el
inicio de la meditación. El descansar la mente cierto tiempo es muy
beneficioso.

         Por otra parte, como enfermo crónico
que fui, llegó a mis manos la Tabla de Energía Taquiónica piramidal, atribuido
al Antiguo Egipto, y me cuestioné mis males. Llevo practicando casi 8 años, y
me he regenerado íntegramente, siguiendo sus procesos. Verifiqué los resultados
en otras personas, por supuesto antes de iniciarme. 

         Esta energía vital puede ayudarnos a
dejar de ser Esclavos de nuestra mente, la cual penetra a través de nuestras
células regenerando cada órgano a sus funciones primitivas. Debemos hablar con
pasión de lo que conocemos, cuando no quedan dudas sobre sus virtudes, es mi
filosofía.

         Como explico en espaciodesanacion.com
hemos ayudado a sanar a mucha gente, varios con enfermedades desmielinizantes,
además de otros muchos casos diversos. Siempre supe que no todo es malo en
nuestras vidas.

         Estuve hace años en el Sahara, y pude
comprobar que existen los Oasis, es cuestión de encontrarlos no confundiéndonos
como en el desierto, cuando observas esos vapores, sombras o manchas sobre el
suelo o carreteras, en plena desesperación. Entiendo que es demasiado bueno
para aceptarlo, pero fácilmente comprobable. Date tu última oportunidad de
mejorar tu vida o sanar, dependiendo de lo avanzado de tu estado.

Sal del callejón en que te encuentras.
Hay que dedicarle un mínimo de 1 a 2 horas diarias, depende cada caso.
Compatible con tratamientos médicos, y sin efectos secundarios.

  Si la montaña no viene a mí, yo iré a
la montaña, una frase que conozco hace años y desde ya pongo en práctica. Estoy
abierto a estudiar los casos que presentéis, a título individual, pero mejor si
son pequeñas asociaciones o grupos, aunque sean casos diferentes por más
extraños que parezcan, en lugares cercanos o en cualquier país o continente.

          Estoy muy seguro de lo que afirmo para
semejante propuesta. Lo importante es propagar este sorprendente sistema, el
valor es secundario. Ponte en contacto con
«info@espaciodesanacion.com», o el teléfono 00598 91 074 500 (gratis
por Whasapp).

Hay
que despertar consciencia.

yofuiesteanciano.com